Por: Constanza Martínez Gaete
Fuente: Plataforma Urbana
La última Encuesta Origen Destino, realizada por el Ministerio de Transportes y Telecomunicaciones (MTT), arrojó que de los más de 18 millones de viajes que se hacen en un día laboral en la Región Metropolitana, un 34,5% corresponde a las caminatas, el modo de movilización que en la hora punta es el segundo con mayor presencia, alcanzando un 26,6%.
Sin embargo, el deterioro que tienen las veredas en distintos puntos de Santiago no favorece los desplazamientos seguros, sino que las termina por convertir en lugares peligrosos para sus usuarios, especialmente los adultos mayores.
De hecho, esta es una de las principales causas de fracturas en este segmento de la población, haciendo que en los últimos 5 años los accidentes de este tipo aumenten en un 40%, de acuerdo a la Intendencia Metropolitana. Además, de los 26 mil accidentes laborales ocurridos en 2015, un 25% fue ocasionado por aceras en mal estado.
Es por estos motivos que este organismo creó el plan “Santiago Caminable” que comprende intervenir las veredas de 48 comunas de la Región Metropolitana, con el objetivo de mejorar su calidad mediante la reparación y restauración. La iniciativa, que cuenta con un presupuesto superior a los $45 mil millones, se implementará con énfasis en aquellas comunas más antiguas.
Una de estas comunas corresponde a Independencia, en donde el plan se lanzó oficialmente este sábado 5 de marzo y que como parte del plan recibirá $3.800 millones (monto similar al que recibirán Talagante, Quinta Normal y Santiago). La necesidad de este sector de la zona norte de Santiago radica en el hecho en que según la encuesta del ministerio, es la comuna que tiene mayor tasa de viajes no motorizados de toda la región, llegando a un 56,3% que se mueve a pie o en bicicleta.
A su vez, Independencia es la comuna con la tercera mayor presencia de adultos mayores, según el Servicio Nacional del Adulto Mayor (Senama), en donde este segmento de la población comunal representa un 23,7% del total de habitantes.
Acerca del plan, el intendente de Santiago, Claudio Orrego, sostuvo durante el lanzamiento de la iniciativa que “antes que todo, Santiago tiene que ser una ciudad caminable. Y para eso tenemos que tener veredas en buen estado y dignas para la gente”, y agregó que “la gran deuda que tenemos en la ciudad de Santiago son las veredas”.
De esta manera, se espera que en 2018 la región cuente con espacios públicos de mejor calidad y que ofrezcan seguridad durante los desplazamientos a todos sus usuarios, especialmente de aquellos con movilidad reducida y fomentando este modo de movilidad sustentable.
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